El Café Francés está como para resurgir de sus cenizas

Angela y Lucien, propietarios del Café Francés estuvieron presentes anoche y sintieron la solidaridad de la gente.

Un gran apoyo solidario recibió anoche el Café Francés a través del Guarará que se realizó en la Costanera de Asunción. Casi un millar de personas concurrieron anoche para expresar su solidaridad con los propietarios del local que se incendió totalmente el sábado pasado en San Bernardino.  Sus propietarios ya fijaron para el 14 de mayo la posible reapertura utilizando el local que fue cedido por Walterio en la ciudad veraniega.

Ángela Delgado Noël y su marido Lucien Noël, propietarios del siniestrado local gastronómico estuvieron presentes en la jornada de anoche realizada en el complejo Barrail, en la costanera de Asunción, a orillas del río. Todo lo recaudado en la oportunidad será donado para la reapertura del Café Francés. De momento están preparándose para atender en el local cedido por Walterio.

Cerca del millar de personas se hizo presente anoche en el Guarará realizado en el Complejo Barrail, en la costanera de Asunción.

El público respondió al llamado de solidaridad realizado por los organizadores del Guarará y calculando que ingresaron aproximadamente 900 personas pagando una entrada de 50 mil guaraníes, se tiene una recaudación de 45 millones de guaraníes. Al cierre de nuestra edición, los responsables de la organización continuaban haciendo el arqueo final por lo que las cifras mencionadas no son aún oficiales.

Además se habilitó una mesa especial para recibir donativos, desde efectivo hasta materiales de construcción y se habilitó una lista de donaciones en comerciales tales como NGO para que la gente pueda donar equipos de cocina y otros implementos.

André Magon mostrando a Angela el queso que utilizaron para los Raclettes, uno de los platos emblemáticos del Café Francés.

Angela y Lucien recibieron ayer muchas muestras de simpatía y solidaridad. Aparte de ser los responsables de uno de los locales iconos de la ciudad veraniega que se caracterizaba por su cocina regional con influencias, portuguesas y francesas, los dueños son personas mayores de 80 años que son verdaderos personajes de la actividad gastronómica de la ciudad.

En homenaje al Café Francés, uno de los platos de anoche fue Raclette, cuya preparación estuvo a cargo de un equipo comandado por André Magon y Sebastián Saavedra del Kitchen Lab. Se quemaron hasta los huesos a falta de los equipos necesarios pero no por ello estuvo menos satisfactoria la degustación de los quesos.

La gran parrilla llamada Asodolandia, echando fuego ante la atenta mirada de los parrilleros y del público detrás de los tablones. Mientras su propietario Leyzman Salim y Eduardo Dios echan temas despreocupados.

El otro punto alto fue el Asadolandia de Leyzman Salim, su parrilla multiuso en dónde cabían dos lechoncitos, numerosas estacas con cordero y carne vacuna, unos pollitos cocinados al estilo mbopi, asado a la olla y otras carnes diversas preparados en brochetas. Los organizadores del Guarará anunciaron que el próximo miércoles harán un informe final acerca de todo lo que se recaudó con esta iniciativa, que busca la reconstrucción y reapertura del Café Francés.