Las cervezas artesanales o alternativas como preferimos llamarlas, vienen abriéndose paso agigantadamente en el ambiente gastronómico local, basándose en los sabores que presentan y también en la versatilidad que poseen para maridar con diversos platos. Una muestra de esto fue lo que ocurrió ayer jueves en el Molinillo de Café de Casa Rica donde una nutrida concurrencia pudo disfrutar de una cerveza alemana, tres inglesas y dos paraguayas con sus respectivos maridajes.
La cata de cervezas fue propiciada por Sajonia Brewing Co., la más importante empresa paraguaya que se dedica a la producción de cerveza artesanal y su principal responsable Jorge Biederman brindó una charla dando pormenorizados detalles acerca de la historia de esta bebida, los tipos que existen así como los diferentes estilos presentados, describiendo sus características y propiedades.
La jornada se inscribe dentro de la necesidad de dar a conocer información al público consumidor acerca de la variedad de productos de esta naturaleza, ya que actualmente existe una nutrida oferta y se está tomando conciencia de que debe difundirse este conocimiento. La cerveza que más se consume en el país es la del tipo lager que son producidas en forma industrial y a gran escala por las grandes marcas.
La cerveza artesanal, en cambio, no tiene un gran volumen de producción, en su conjunto, y no es comercializada a través de los canales habituales, por lo que el acceso a ella generalmente se obtiene en ciertos y determinados locales, que por cierto están muy alejados de las cadenas de supermercados y los restaurantes de alta cocina.
Todas las cervezas se elaboran a partir de cebada, agua, lúpulo y levadura. La diferencia principal entre las cervezas industriales y las artesanales estriba en las proporciones, en el tratamiento de la materia prima y en el proceso de elaboración. Las artesanales no usan aditivos ni conservantes y son muchas más atractivas en el sabor. Cada maestro cervecero desarrolla su fórmula.
Esto fue lo destacado de la cata de cerveza que nos ocupa. Se degustaron seis cervezas distintas y todas diferían en sabor, y además en sus otras cualidades. La diferencia de sabores desde lo amargo hasta lo dulce producía una invitación al maridaje. Provocaba la necesidad de probar un bocado de acompañamiento.
Todas las cervezas estuvieron maridadas, podríamos decir que en general se acompañaron de comidas rápidas, casi minutas, y solo un risotto de camarones a la Provenzal ponía una nota de alta cocina. Pero, en cuanto llegue a difundirse el conocimiento de los sabores de cervezas será inevitable que los chefs y cocineros traten de ofrecerle en matrimonio con algún plato. Esto apenas es el comienzo.
Las cervezas que se degustaron fueron seis, a saber:
-Franziskaner Hefe-Weissber, una cerveza alemana hecha de trigo, con leves notas a caramelo y tostado, especias y frutas. Se eligió para el maridaje, unos sandwiches de atún (Tuna Melt) con un mix de verdes.
– Sajonia Pale Ale, cerveza paraguaya, que tenía un dulzor inicial a caramelo, tostado, un amargor robusto redondeado por el aroma de los diferentes lúpulos. Se eligió para maridarlo, unos ravioles rellenos con queso, fritos no hervidos, acompañados de salsas de mayonesa de azafrán y una combinación de salsa de soja, jengibre y balsámico.
-Fuller`s India Pale Ale, procedente de Inglaterra. También con un dulzor inicial pero con un intenso amargor balanceado con sabores a caramelo y tostadas provenientes de la malta. Esta cerveza fue maridada con Croquetas Spicy, una novedad de Casa Rica, que inmediatamente remontó nuestra memoria a las croquetas picantes de la Alemana 2.
– Fuller´s Golden Pride, procedente también de Inglaterra, con una gama de sabores, amargor moderado, con leves notas cítricas y reminiscencias a pan, malta y granos tostados. Fue maridado con un Risotto de Camarones a la Provenzal (Quinta Gama).
-Fuller`s London Porter, inglesa con un contundente sabor a café y chocolate, pero con un dulzor inicial. Fue maridado con palitos hojaldrados con queso, polenta frita, salsa de tomates y albahacas.
-Sajonia Brown Ale, de procedencia paraguaya, con aroma a frutos secos, nueces, café y con un sabor final tendiente a lo amargo pero medio seco y liviano. Se maridó con Trufas de Nutella, y shots de mouse de chocolate.
Esta síntesis nos puede dar una idea de la diversidad de sabores que podemos encontrar en la cerveza. Según la información que recibimos en la oportunidad existen más de 900 aromas y sabores que pueden encontrarse en esta bebida. Es un campo todavía muy virgen en nuestro país y que día a día se está expandiendo, porque crece el número de fabricantes de cerveza artesanal y cada vez más los consumidores entran en contacto con ella.
En varios países del mundo, Estados Unidos, España y Brasil, por citar algunos de los más importantes, la irrupción de la cerveza artesanal constituye todo un boom y conforme a lo que se viene observando localmente, es probable que aquí ocurra lo mismo. Paraguay, es un país cervecero, y esta bebida puede fácilmente convertirse de bebida de refrescancia a una bebida de deleite.
Sobre este tema, le invitamos a leer el siguiente artículo. “La cerveza es mejor que el vino para el maridaje”
Eduardo Baez Balbuena