Hace un año y ocho meses está cerrado. Tiene todavía 60 días de trabajo para reabrir de nuevo al público en la nueva ubicación que eligió para tratar de retomar su función como uno de los principales restaurantes de la ciudad y uno de los mejores en cocina italiana. Para aguantar esta crítica situación económica se está comiendo la cola. Y es toda una incógnita saber si reaparecerá con la misma distinción que tenía.
El restaurante Rolandi hace tres meses tuvo que desalquilar el inmueble donde estaba ubicado sobre la avenida Mariscal López esquina Venezuela. Ese privilegiado lugar era un lugar de ensueño para el nivel que tenía el local gastronómico. Nos imaginamos el elevado costo que tenía el arrendamiento. José Carlos Grillón, el propietario reconoció que ya no podían hacer frente a ese costo teniendo parado el restaurante.
Ahora estará ubicado en la esquina de General Garay y Del Maestro, en el mismo lugar donde Colaso Bo tenía La Trattoría de Tony. “El lugar es lindo no dudo que allí también tendremos éxito, se creó un pequeño polo con la presencia cercana de la cervecería Palo Santo, la discoteca Morgan y hay otros pequeños locales y un hotel al lado nuestro”, nos comentó Grillón.
Actualmente, están realizando unas pequeñas refacciones en el lugar para adecuarlas a las necesidades de Rolandi. El local tiene capacidad para más de 100 personas y tiene un salón privado para unas 30. De todas maneras, los trabajos que faltan demandarán unos 60 días de trabajo y la reapertura está previsto para el mes de enero, aunque lo ideal era habilitarlo en el mes de diciembre cuando existe una mayor demanda gastronómica.
El restaurante Rolandi tendrá la misma ambientación, aunque Grillón no descarta que haya algunos cambios. Todos los muebles fueron embalados y puestos en un depósito a la espera de la hora de reutilizarlos. La marca siempre se caracterizó por ofrecer ambientes finos y decoraciones distinguidas.
¿Y la cocina va a ser la misma?, le preguntamos a José Carlos. “Claro, yo mantuve conmigo a todo mi personal. Nadie fue despedido durante este tiempo. Como voy a mantener la marca, su tradición en la cocina, si no conservo a mi personal. Es impensable contratar a nuevos cocineros para enseñarles a preparar recetas que ya son tradicionales. Todos siguen conmigo”. Son 32 personas que se encuentran con suspensión de sus contratos de trabajo.
Luego comentó que no quiso o no pudo abrir desde que se declaró la pandemia, porque tienen un alto costo operativo y no podían estar cerrando, abriendo y atender hasta las ocho de la noche. “Cuando quise abrir, volvimos a fase uno. Los fines de semana hacíamos delivery, pero eso representaba solo el 10% de nuestra facturación normal, antes de la pandemia”.
¿Cómo aguantaron todo este tiempo?
Gracias a los amigos y a que tenemos la marca Rolandi. Tuvimos que comernos la cola. Pero le fue mal a todo el mundo con esta pandemia. Tuve que entregar muchas mejoras cuando salimos de nuestro local, entre ellas un gran salón de eventos. Tuve que hacer borrón y cuenta nueva.
El restaurante Rolandi fue creado por el chef italiano Fabio Rolandi, allá por el año 2.000. Proviene de una familia que tradicionalmente se dedicó a la hotelería y a la gastronomía. Antes de llegar al país ya tenía mucha fama bien ganada. En Miami, fue declarado chef del año. Acá aplicó un concepto de pasta y grill. Producía pasta de alta calidad y creó muchas recetar para cocinarlas al tatakuá. Su primer local se instaló en Mariscal López esquina Infante Rivarola, donde actualmente está Josephine del grupo Talleyrand.