El marcador fue de 7-0. Por primera vez, todo el jurado, que estuvo esta vez ampliado, se expidió hacia un solo lado, destacando a uno de los grupos que participó en la prueba por equipos. La eliminación recayó esta vez en Karina Ruíz Díaz quién pese a haber preparado un plato cuya presentación ni ella misma podía creer, defeccionó notoriamente en la salsa, por su falta de experiencia.
Lo más emocionante e interesante estuvo ayer en el primer desafío de la noche, en la prueba por equipos. Se formaron tres de cinco integrantes cada uno y la consigna fue que debían preparar 10 variedades de finger food (dulce y salado) y 20 unidades de cada uno de ellos. Juan Angel Villamayor, por realizar el mejor plato del programa pasado tuvo el privilegio de elegir a quienes al igual que él serían los capitanes de los otros equipos: Waldi Riveros y Walter Ferreira.
Pero además tuvo el privilegio de elegir directamente a quienes quería en su equipo. Y formó una verdadera selección: Julián Endara, Rodrigo León, Osvaldo Villalba y Regina Cabañas. Los otros dos capitanes, Waldi Riveros y Walter Ferreira se distribuyeron entre sí a los demás integrantes del staff de participantes. Allí ya estuvo definida la suerte del desafío, que por lo demás era sin duda el más ingenioso e interesante de los que llevamos visto en todas las temporadas de MasterChef.
El equipo de Juan Angel se destacó no solo por el nivel de su organización y capacidad, sino que brilló desde la misma definición de los finger foods que iban a presentar. La simple enumeración nos puede dar una idea de ello:
-Roulade de pollo relleno de palmitos y envuelta en panceta, lactonesa de perejil y emulsión de ajo negro
-Crepe relleno de salmón ahumado, crema ácida de catupiry, kuratu, alcaparras y topping de caviar
-Terrina vacuna con aceitunas, alcaparras, queso y topping de crema acida con mango
-Arancini de arroz cítrico relleno de morrones y champignon con salsa de jamón serrano
-Camarones apanados con coco rallado, sésamo y panko con salsa de frutilla
-Focaccia de tomatican de chorizo toscano y espuma de curry
-Jamón Serrano con crema de queso azul
-Crocante de maní con crema de harina de maíz tostada y topping de maní troceado
-Crocante de bretona con salsa inglesa de chocolate y tartar de frutas.
El jurado, esta vez, estuvo ampliado con la participación de cuatro ex participantes de la temporada anterior: Isaías Ledesma, Fernando Fabio, Noelia Leguizamón y Juliana Sosa. Todos dieron su voto a la presentación realizada por el equipo de Juan Angel Villamayor. No hubo ocasión siquiera para definir quién quedó en segundo o tercer lugar. Hubo menciones especiales para los camarones apanados y con salsa de frutilla. De los otros equipos también se alabaron un chicharo huiti de lomo y unos camarones con salsa de guacamole. Nunca antes en MasterChef hubo una decisión tan unánime y contundente.
Los equipos perdedores pasaron a eliminación, pero sus respectivos capitanes Waldi y Walter tuvieron la oportunidad de salvarse o salvar de la prueba de eliminación a uno de los integrantes de sus equipos. Walter decidió salvarse a sí mismo pero Waldi optó por salvar a su hermano el Negro Riveros, que hasta el momento está realizando su participación en MasterChef trepado al lomo de su hermano y no ha tenido oportunidad aún de demostrar individualmente las cualidades de cocinero que lo llevaron a participar del programa.
Quedaron para la eliminación: Alex, Karina, Waldi, Carolina, Sergio, Leticia, Lizzie y Petta. Y el desafío consistió en que debían preparar un plato principal, dulce o salado, teniendo a los cítricos como protagonista principal. “Me quedé en blanco, no sé para donde apuntar”, se le escuchó decir de Karina al escuchar la consigna. Tan nerviosa estaba que Colaso trató de calmarla diciéndolo “no quiero que te vayas”. Karina se arregló como pudo y presentó una Bondiola de cerdo con reducción de naranja, pomelo, mandarina y vino tinto, acompañado con puré rústico.
Estuvo re lindo su plato, ni ella lo podía creer. Euge alabó de entrada su presentación. La salsa tenía un brillo y texturas increíbles pero cuando llevó un bocado a la boca, su cara se transformó en un instante y sus elogios iniciales se convirtieron en una frase lapidaria: “esto está incomible”. La salsa estaba amarga, cometió el error de procesar sus cítricos con la cáscara y lo que pudo ser un pasaporte seguro para subir al balcón devino en un pasaje para la eliminación. Ni los errores que cometió Leticia se compararon con semejante despropósito.
Una mención especial para Carolina Ronquillo quién presentó unos Langostinos crocantes de coco y naranja y Langostinos crocantes al estilo texano, haciendo más de lo que se le había pedido pero sobre todo con un colorido y presentación que hizo recordar a la gastronomía de su Perú natal. Un mismo producto con diversa elaboración que sorprendió al jurado por sus sabores al punto que subió directamente al balcón sin esperar el veredicto final.