El conocido exitoso bar King Fish, ubicado sobre la calle Senador Long casi España fue clausurado por tres días por orden judicial, a instancias de la Secretaría de Estado de Tributación (SET) por no expedir comprobantes legales de las ventas que realizan en el lugar. Sus responsables dijeron a los medios que se trata de una situación casual que van a revertir en los próximos días.
El pasado lunes, una comitiva de la SET se presentó en el lugar para proceder al cierre. Conforme a las explicaciones brindadas, funcionarios de la citada repartición del Ministerio de Hacienda habían concurrido al lugar simulando ser clientes y pudieron comprobar que no se expedían comprobantes legales por el pago de las entradas y tampoco por las consumiciones dentro del local.
A consecuencia de los hechos, el local fue cerrado hasta el miércoles 9 de enero como indica el Acta de Intervención N° 1450, firmado por la jueza Norma Emilce Cristaldo Ramos, del Juzgado de Primera Instancia en lo Civil y Comercial del Primer Turno de la Capital. Durante el periodo de cierre los funcionarios de tributación realizarán un control a fin de tratar de determinar la naturaleza y el monto de lo que se habría evadido en concepto de tributos.
Por su parte, los responsables de King Fish hablaron con los miembros de la prensa y señalaron que durante ese lapso podrán regularizar todos los inconvenientes que se les atribuyen ya que trabajan de manera legal y señalaron que probablemente algunos funcionarios por error o por apuro, no habrán emitido las facturas correspondientes.
El local tiene poco más de un año de antigüedad. Desde su habilitación concitó el interés de la clientela joven y pronto se constituyó en un lugar de éxito. Se caracteriza además por ser el escenario donde desfilan los principales grupos musicales del país y en los últimos tiempos daban allí conciertos día a día.
No es la primera vez que King Fish tiene problemas con su funcionamiento. En el mes de octubre del año pasado, también fue intervenido por la Municipalidad de la Capital por hecho de que sus instalaciones no estaban preparadas suficientemente contra la prevención de incendios. El local fue clausurado, pero sus propietarios lograron superar el inconveniente y siguió funcionando normalmente.
Anteriormente, tuvo un incidente muy particular. Un cliente del lugar llevó una noche a un pato de su propiedad y algunos de los presentes filmaron cuando le daban de tomar alcohol. El video fue divulgado en las redes sociales y generó una ola de indignación, no faltaron quienes pidieron la clausura del local. El autor asumió la responsabilidad del hecho y después de eso el incidente no pasó a mayores.
Los propietarios de King Fish son los mismos dueños de Long Bar, otro conocido local ubicado en frente a King Fish y de Long Beach, un bar con estilo de playa que estaba ubicado en Charles de Gaulle y Las Palmeras, que fue clausurado por la Municipalidad de la Capital luego de un largo conflicto con los vecinos del lugar, que adujeron que el local no cumplía con las ordenanzas municipales.
La intervención de la SET en King Fish se realizó en el marco de un operativo denominado “Año Pyahu”, que arranca la Administración Tributaria para intensificar los controles y atacar durante el primer trimestre del 2019 varios frentes relevantes en materia tributaria, según explicaron el director de Apoyo y de Administración de Finanzas de la SET, Oscar Orué y el director de Fiscalización Tributaria, Daniel Farías. Lo cual implica que otros locales gastronómicos podrían estar en la mira.