La Pascuala es ahora una parrilla uruguaya

El restaurante La Pascuala, parrilla uruguaya está ubicado sobre la calle Manduvirá entre Chile y Alberdi.

El restaurante La Pascuala, ubicado sobre la calle Manduvirá entre Chile y Alberdi, se transformó ahora en una parrilla uruguaya luego de su paso por la gastronomía paraguaya. Allí se van a ofrecer los mejores cortes de carne vacuna de la marca La Florencia Premium Beef, provenientes de animales jóvenes especialmente seleccionados para brindar a los clientes un producto de calidad superior.

Galli López uno de los propietarios del local nos comentó que la idea nació cuando visitó la estancia de un amigo uruguayo, Alejandro Méndez, ubicado en el distrito de Pirayú donde tuvo la oportunidad de probar la calidad de la carne que produce, quedando gratamente sorprendido.

“Ahí le comenté a Alejandro, que hacía muchos años que estaba dentro del mundo gastronómico, haciendo catas, organizando eventos, y al frente del marketing en varios locales incluyendo el mío (Santa Gula) en su momento. Ahí empezamos a darle forma a este proyecto”, expresó.

El famoso corte Tomahawk u ojo de bife con hueso es uno de los platos ofrecidos junto a otros cortes Premium.

“El concepto es dar al comensal una calidad de carne única, porque nosotros mismos producimos nuestras cortes con animales jóvenes y teniendo su trazabilidad, tanto en carne vacuna como de en carnes de cordero”, dijo más adelante. La carne es producida por La Florencia Premium Beef, que, al lado del restaurante, en la esquina de Chile y Manduvirá tiene su show room.

“Elegimos locación a La Pascuala porque ya era un clásico en la Parrilla Asuncena, pero dimos un golpe de timón tratando de hacer algo muy singular y al mejor precio. Al producir nuestros principales insumos nos da la posibilidad de estar 25% más barato que el resto, aparte de tener una calidad superlativa” continuó diciendo.

La Pascuala, conocida también como Cabaña La Pascuala nació como un restaurante del Hotel Excelsior, ya que se encuentra anexo al mismo, pero con una entrada independiente. Era un restaurante que proponía un servicio de asado paraguayo y con comidas típicas de nuestro país. Tenías show de música folklórica con participación de grupos de danza. Cerró sus puertas con motivo de la pandemia. Y hace pocos meses reapareció como Cabaña La Pascuala, parrilla uruguaya.

Galli López (en el centro con remera negra) y a su derecha Alejandro Méndez, los propietarios, aparecen junto al personal de servicio. (Fotos Gentileza),

La parrilla uruguaya se caracteriza porque se cocina a las brasas y a los tradicionales cortes de carne incluye las achuras y el famoso bionato (batata) cocinadas al plomo. Antes de la pandemia Asunción tenía varias parrillas uruguayas. Entre ellas Alma Cocina con Fuegos, Lo de Silverio y La Huella. El primero de ellos pasó a otro propietario y si bien continúa con los asados a la parrilla cambió el estilo. Los dos restantes desaparecieron con la pandemia.

La Pascuala es ahora el restaurante de La Florencia Premium Beef, que ofrece cortes tales como el bife ancho, vacío, costilla cuadril, corazón de rabadilla, tapa cuadril, matambrito, costilla ancha, costilla extra ancha y la costilla bandera. “Vinimos a dar al consumidor la oportunidad de que tenga en su plato la carne que el primer mundo consume”, asegura Galli López.

Aparte de los cortes a la parrilla tienen hamburguesa rellenas y tradicionales, chivitos, pastas, ensaladas, milanesas y otros platos. En promedio los precios de los platos principales están entre 70.000 y 95.000 guaraníes.  “Contamos con los mejores vinos que son elegidos cuidadosamente buscando un mayor disfrute de nuestra clientela sin que deban pagar mucho por ello”, expresa nuestro entrevistado quién también se desempeña como sumiller.

El local cuenta con capacidad para 70 personas y según nos dijeron realizaron una ambientación de primer mundo. Se abre de martes a sábados a partir de las 19:00 y los domingos desde las 12:00. Cuando preguntamos que iban a tener de diferente de otros locales que también se dedican al mismo rubro, nos dijeron: “nosotros los dueños vamos a estar siempre”.