Historia de amor que acabó en la repostería

Nadine tenía 24 años y estaba cursando el cuarto año de arquitectura en la Universidad Nacional de Asunción cuando conoció al francés Sebastián Gaillard en 1999. Dos años después dejó todo y lo siguió a Europa. Él se convirtió en chef, pusieron un restaurante y ella se encargó de la repostería. Fue autodidacta, luego estudió, descolló en un concurso y ahora tiene un negocio propio. Se casaron, viven en Francia y tienen tres hijos.

En aquella época la Chopería del Puerto estaba en auge. Era muy concurrida por clientes de todas las edades. Abarcaba casi toda la cuadra de Palma, entre Colón y Garibaldi. En la esquina de la otra acera tenía una disco donde Sebastián era barman y en los días entre semana hacía de piazaiolo.  Allí lo conoció Mirta Nadine Quiñonez Avalos. “Yo tenía 24 y el cumplía 30”, dice recordando aquellos años.

Emilio Marín, el español conocido como Mr Single, le presentó a Sebastián un Dj de la Costa Brava española y Sebastián se lanzó a la aventura en la Madre Patria. “Dos años después, en el 2001 dejé todo y lo seguí”, recuerda Nadine.  Desde el 2001 al 2003 vivieron en España, en el 2004 se casaron en Francia. Durante los años 2009, 2010 y 2011 gerenciaron un restaurante y en el 2012 “compramos un local y armamos nuestro restaurante”.

Nadine y su esposo Sebastián posando con el mar de fondo, en Costa Rica. En dicho país participaron de un evento denominado Ruta Gastronómica como chefs miembros de «Los sombreros blancos» una organización que busca transmitir al excelencia de la cocina francesa.

El local se llama La Truffe y Algo Más y está ubicado en el pueblo de Aups que se encuentra en la zona de Provence-Alpes-Costa Azul. Es la tercera capital productora de las trufas. El restaurante precisamente se especializa en trufas, foie gras y otros productos. Sebastián es el encargado de la cocina y Nadine de la pastelería y el servicio.

“Lo mío en gastronomía fue por amor, ya que mi marido es chef y cuando abrimos nuestro primer restaurante lo acompañé en la aventura. En la pastelería soy autodidacta, me encanta leer libros y realizar las recetas y también adaptarlas a los gustos actuales. Soy pastelera profesional desde hace 2 años, que es cuando obtuve el título aquí en Francia antes ejercía como pastelera amateur”, reconoce Nadine.

“En 2018 participé en un concurso de televisión que se llamaba Los Reyes de la torta, era solamente para amateurs. Me eligieron entre 500 participantes de mi región y quede entre los cinco primeros En esa época había presentado un homenaje a Paraguay con Mi postre Paris-Dakar que estaba hecho de mburucuya, mango y guayaba, recordando que en el 2017 la largada de la carrera se hizo desde Asunción”. El concurso tenía como jurado a Ciryl Lignac y Frederic Bau, dos grandes pasteleros de renombre de Francia.

En el 2018 Nadine participó en un concurso gastronómico donde presentó su postre Paris-Dakar, un homenaje al hecho de que en 2017 la largada se hizo en Asunción. Elaborado a base de mburucuya, mango y guayaba.

Agrega. “De la repostería creo que lo que más me gusta es el rigor y del otro lado la creación. Siempre dije que la arquitectura al final me sirvió para lo que hago ahora, porque para crear un buen postre o un buen entremet hace falta una buena base y construcción, como en la arquitectura. Comencé a interesarme en la repostería después que adquirimos nuestro restaurante. Pero luego pensando más, me di cuenta de que siempre me gusto porque cuando era chica en mi adolescencia siempre hice tortas, pastelitos, y estaba detrás de mi tía que hacía tortas para pedidos”

“Tengo el restaurant para poder exprimirme y expresarme en la pastelería. Al lado del restaurante tengo un pequeño salón con el concepto de Bubble Tea. Allí hago mis dulces para la venta, recibos pedidos por internet. El concepto de Bubble Tea es importado de Taiwán y está haciendo furor. Es una bebida a base de té al cual se agregan concentrados de frutas y tiene muchas variantes. Se puede hacer en base a leche y milkshake y se le agrega perlas de frutas”.

Para el chocolate sigo mucho las tendencias de Frederic Bau, jefe pastelero e instructor de la Escuela Valrhona. Me encanta las realizaciones de un jefe muy joven que se llama Julien Dugourd que está hacia Mónaco, también la forma de trabajar las frutas de Cedric Grollet, y ahora estoy siguiendo mucho a un pastelero con nuevas tendencias de aligerar los postres y tratar de no poner mucha materia grasa.”

Fachada del restaurante La Truffe, que está en el pueblo de Aups, una de las capitales de la producción «del diamante negro de la cocina».

Recientemente Nadine y su marido viajaron a Costa Rica donde abrieron la primera sede en Centroamérica de Les Toques Blanches Internacional (Los Sombreros Blancos Internacional), una organización que tiene por objetivo la transmisión y la conservación de la cocina francesa. “También ayudamos a los jóvenes aprendices en cocina para que sean becarios y les hacemos hacer un tour por Francia o el extranjero para que hagan pasantía en diferentes restaurantes. Algún día me gustaría abrir una sede en Paraguay. La Asociación de hace cargo de ubicar a los becarios en casas de renombre, por dos años”.

Nadine tiene ahora 46 años y tres hijos. Al mayor le gusta el rubro de la hotelería y los acompaña trabajando en el servicio de catering. La última vez que estuvo en Paraguay fue en el 2003 cuando vino para pasar las fiestas con la familia.  Casi toda su familia vive en Paraguay, su papá, su hermana que es doctora, sus tíos y primos. Su mamá y un hermano viven en Valencia, España. Y Nadine es la prima de uno de los políticos más importantes de Paraguay.

Un postre creado por Nadine para el Día de los Enamorados. Su página en Instagram se llama Un Monde sucré by Nadine y alli se pueden encontrar sus creaciones. Fotos Gentileza.