El domingo pasado se realizó una particular competencia en un sitio turístico del interior del país, en el cual participaron equipos de varios lugares ante un calificado jurado de profesionales. Ganó la competencia, un joven parrillero de Luque. Lo peculiar del torneo fue que los participantes no podían utilizar los habituales equipos de cocción (parrillas, tambores, cruces) y debieron ingeniarse con lo que encontraban en el lugar, a orillas de un arroyo.
El singular encuentro se realizó en el Complejo Turístico Paraíso, de la ciudad de Valenzuela, en el Departamento de Cordillera. Participaron ocho equipos provenientes de diversas ciudades que fueron convocados a través de las redes sociales del citado establecimiento, uno de cuyos propietarios, el señor José Avalos fue el organizador.
El ganador del torneo fue el equipo denominado Adela Memby de la ciudad de Luque, que estaba capitaneado por Antoliano Acosta de 27 años. El premio fue de 6.500.000 guaraníes. En segundo lugar, se ubicó el equipo BDF, de la ciudad de Encarnación, que recibió como premio 1.500.000 guaraníes, y en tercer lugar quedó el equipo, El Marino Asador, de la ciudad de Valenzuela, que recibió 500.000 guaraníes.
El jurado estuvo integrado por Benjamín “Asado” Benítez, Leyzman Salim, Pedro Benítez (hijo de Don Benjamín), Oscar Bareiro (de Papa Parrilla, Asunción), Juan Manuel Velilla (Don Manolo, catering de asado, Asunción) y por Cayetano Avalos, el otro propietario del complejo turístico. El jurado también debió contar con la participación de un representante del IGA, quién no pudo llegar al lugar por un problema de movilidad. Los jueces tuvieron a su cargo juzgar aspectos tales como la terneza de la carne, el sabor, la técnica utilizada, la presentación del plato y la higiene de todo el procedimiento.
Entre las condiciones del torneo se estableció que los participantes no podían recurrir a los tradicionales equipos que utilizan para cocinar un asado. No hubo parrillas, tatakuas, tambores, cruces, etc. Tuvieron que recurrir a los medios que le brindaba la naturaleza, que en el lugar exhibía una exuberante vegetación. Podían usar estacas, chapas, alambres, cadenas, etc.
El corte de carne que tenían que utilizar fue la costilla. El uso de condimentos fue libre, y el plato tenían que presentar con una guarnición a elección y podían estar acompañados de mandiocas o batatas. El tiempo en que debían hacer sus preparaciones fue de 09:30 a 13:00. El ganador presentó su costilla acompañada de una ensalada de porotos y sopa paraguaya.
Antoliano Acosta, nacido en Luque, pero viviendo en Ñemby, poco después de ganar la competencia grabó un video que levantó en YouTube donde dedicaba el triunfo a su madre (Adela Memby) y anunció que este domingo le cocinará el asado ganador. Para ir al concurso se hizo de dos palos de escobas y un pedazo de chapa, que sobró del “techito” que está edificando para su familia (tiene dos hijas).
José Avalos mencionó que próximamente viene la competencia de pescados, que inicialmente está previsto para el 16 de abril. Anteriormente, ya habían realizado una competencia para elegir a la mejor sopa paraguaya y también hubo un torneo de robótica. El Complejo Paraíso se caracteriza porque en el lugar no se permite música (la estridente por lo menos). El sitio es bastante rústico y está bañado por un importante arroyo. El complejo cuenta para alojamiento con casitas de madera, algunas en medio y sobre los árboles, que cuentan con todos los servicios. “Es especial para pasar un día en familia”, nos comenta.
Valenzuela, está ubicada a 50 kilómetros de Caacupé. Se llega por la ruta II, pasando la ciudad de Eusebio Ayala, antes de llegar a Itacurubí de la Cordillera, se debe tomar el desvío y se llega a la ciudad por ruta asfaltada.