El Highball lleva una medida de whisky por cinco de ginger ale y una rodaja de limón. Así el Jhonnie Walker se convierte en un trago refrescante y delicioso.
En primer lugar el Highball y a la derecha las dos recetas para su preparación. Una con Red Label y la otra con Black Label.
En primer lugar el Highball y a la derecha las dos recetas para su preparación. Una con Red Label y la otra con Black Label.

La filosofía de la marca es que el whisky debe tomarse como el consumidor lo prefiera. Ya no es solamente eso de que debe tomarse puro, solo o con hielo. Johnnie Walker ahora crea sus propios tragos. Primero fue Redfresh y ahora a nivel global lanzó Highball. En Asunción, se hizo un evento en donde se pudo apreciar que esta bebida es apta para acompañar distintas celebraciones y en diferentes ocasiones de consumo.

Highball tiene dos versiones. La primera es con Johnnie Walker Red Label, con un refresco de lima limón y rodajas de naranja. El segundo con Black Label, acompañado con ginger ale y rodaja de naranja. La proporción es de 1 medida de whisky por 5 de refresco, más abundante hielo. Esto hace que las bebidas tengan un bajo tenor alcohólico (6%) y un gran efecto refrescante. El primero con notas a frutas y un poco picante, mientras que el segundo con notas a madera y sabor ahumado.

La mezcla del whisky va cambiando en función a cada país. Esta campaña Highball ya se lanzó en Europa. Y también en Brasil, Argentina y recientemente Uruguay. El concepto es mezclar Johnnie Walker con gaseosas y refrescantes con un estilo veraniego y sobre todo en tragos largos. De hecho Highball significa trago y también se refiere al tipo de vaso utilizado, que son especiales para este tipo de bebidas.

El Highball lleva una medida de whisky por cinco de ginger ale y una rodaja de limón. Así el Jhonnie Walker se convierte en un trago refrescante y delicioso.
El Highball lleva una medida de whisky por cinco de ginger ale y una rodaja de limón. Así el Johnnie Walker se convierte en un trago refrescante y delicioso.

Hoy en día no existe un bar que se aprecie, que no tenga una etiqueta de whisky para preparar sus tragos. Hace años que el whisky participa activamente en el desarrollo de la mixología moderna. Pero, no siempre fue así. Hasta hoy existen algunos puristas que sostienen que el whisky debe tomarse puro. Muchos recordarán que el/la whiscola (whisky con Coca) era una tolerancia que sólo se admitía en las mujeres. Para saber cómo ha ido cambiando este concepto nadie mejor que Carlos María Rodríguez para que nos explique.  Es el gerente de planificación comercial de Diageo, la empresa encargada de la venta de Johnnie Walker a nivel mundial.

La costumbre de tomar el whisky puro es una contribución escocesa y responde a la tradición de querer mantener su sabor. Después, publicidad mediante se fue construyendo el mito que lo tomamos solo. Pero, en esencia, se trata de disfrutar de la bebida, y entonces surge el concepto de espíritu de libertad. El whisky debe consumirse como uno lo prefiera”, aclara.

“Hace 6 meses estuve en Escocia y el grand ambassador global de Johnnie Walker lo primero que me trajo en la mesa fue un Lagavulin con Coca. Se trata de una malta super increíble, una de las mejores que tenemos y que se fabrica en partidas muy limitadas. Yo me imaginaba que se tomaba solo pero me sirvió mezclado con Coca. ´Whisky y libertad, van de la mano, lo importante es que lo disfrutes`, me dijo y realmente estaba bueno”, siguió relatando.

Carlos María Rodríguez, uno de los gerentes de Diageo, con el fondo de la fiesta que brindaron para presentar el nuevo trago de Jhonnie Walker.
Carlos María Rodríguez, uno de los gerentes de Diageo, con el fondo de la fiesta que brindaron para presentar el nuevo trago de Johnnie Walker.

Para Rodríguez la intención de mezclar el whisky con otras bebidas siempre estuvo presente. Así recordó la historia de Alexander Walker II, cuando allá por el 1900 creó que un whisky y lo presentó a los capitanes de barcos que partían de Londres con la intención de que en los destinos a los que iban divulguen la bebida y lo mezclen. Los que iban al Caribe, lo hicieron con agua de coco, los que iban a India, con té; los que iban a Australia con ginger. “El whisky en su idea original era una bebida para mezclar”, argumenta el entrevistado. Claro que no se recomienda mezclar con todas las líneas de Johnnie Walker. El Blue Label por ejemplo se sugiere tomar junto con un vaso de agua helada, no mezclados, para apreciar mejor sus cualidades.

Detrás de estas mezclas también está el objetivo de lograr una mayor “drinkability”. Es decir que el whisky sea más fácil de tomar. Esto amplía el universo de consumidores alcanzando a jóvenes y mujeres y fundamentalmente amplía las ocasiones de consumo. El Highball es propicio para cualquier tipo de celebraciones o simples reuniones de amigos. Igualmente, hace extensivo su consumo a todas las estaciones del año.

“Cuando llegué a Paraguay me decían que el whisky era para consumirlo en invierno. Entonces, no teníamos ninguna chance porque aquí solo existen dos semanas de invierno. Si hacía calor, el whisky ya no estaba presente allí, por un preconcepto. En el Caribe se toma whisky por más que haga calor. Es una cuestión de cultura. Esta bebida es un gran acompañamiento hasta cuando me junto con amigos. Entonces, esta campaña es como una invitación a la democratización del consumo de whisky. Una invitación a seguir tomando tragos refrescantes”.

Los datos estadísticos dan la razón a Carlos María Rodríguez. En los últimos dos años las ventas de Red Label y Black Label se han duplicado en Paraguay. Claro que en invierno se sigue consumiendo más que en verano, salvo en el mes de diciembre, en donde el tema de las celebraciones de fin de año dispara los números hacia arriba. De todas maneras el whisky es la vendida alcohólica más vendida en todo el mundo.

De izquierda a derecha: Giovanni Beron, uruguayo, Ever Portillo, César Ocampos, paraguayos y Adrián Guedes, uruguayo. Los bartenders que tuvieron a cargo la preparación de los tragos.
De izquierda a derecha: Giovanni Beron, uruguayo, Ever Portillo, César Ocampos, paraguayos y Adrián Guedes, uruguayo. Los bartenders que tuvieron a cargo la preparación de los tragos.

El Highball vino para quedarse. De aquí hasta julio del año próximo, Diageo tiene previsto realizar 40 eventos para promocionar la bebida. La mayoría se concentrarán en Asunción pero también están previstas actividades que se desarrollarán en Ciudad del Este y Encarnación.  El evento donde se presentó Highball tuvo lugar en la Quinta Mburucuya, con presencia de los mejores bartenders de Paraguay y Uruguay. Ever Portillo y César Ocampos de nuestro país y Adrián Guedes y Giovanni Beron, quienes estuvieron a cargo de la preparación de los tragos. Hubo un gran momento artístico con la presencia de Kevin Johansen, reconocido cantautor de nivel internacional.

DIAGEO

Diageo es una empresa líder en el mundo de las bebidas Premium y en su portafolios incluye marcas tales como Jhonnie Walker, Tanqueray, Smirnoff, Ye Monks, Baileys, Ciroc y otros más. Sus productos se venden en mas de 180 países alrededor del mundo.  Esta empresa cotiza en las bolsas de valores de Nueva York y Londres.

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2 comentario en “Highball, nuevo trago para Johnnie Walker”
  1. Buenas tardes para hacer una publicación en la página El Omnivoro con referenta a mk local gastronómico como lo hago

  2. Excelente descripción de las maneras de beber esta espirituosa bebida.

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