Medialunas Calentitas habilitó su cuarto local en Asunción, el segundo en Villa Morra, con la particularidad que, en esta ocasión, la nueva franquicia de la marca uruguaya ofrecerá en su local diversas picadas y no solamente los tradicionales productos dulces y salados, a base de masas. La nueva sede está ubicada en la esquina de Cruz del Defensor y Eduardo López Moreira, en una de las cuadras más densamente poblada gastronómicamente hablando.
La habilitación se realizó el sábado pasado aun cuando no terminaron totalmente las obras de reacondicionamiento de la antigua vivienda que existía en el lugar. No se realizó ninguna inauguración oficial porque según nos explicaron la intención es ir probando y acomodando los distintos servicios, en forma previa a un anuncio formal.
Medialunas Calentitas se ubicó en un sector de una gran concurrencia gastronómica, ya que sobre la Calle Cruz del Chaco y en un trayecto de apenas 100 metros, allí se congregaron la nueva versión de La Molleja, No Me Olvides, Las 3 Calacas y Mercadito, además en los primeros meses del año que viene también migrara a esa cuadra el restaurante Sin Reservas, del colombiano Beto Alvarez.
Medialunas Calentitas es una franquicia uruguaya, una conocida marca charrúa que nació en Punta del Este. Hace seis años se instaló la primera franquicia en nuestra ciudad, en Lillo 1418 y Dr. Morra. En el 2013, a través de una segunda franquicia habilitó un local sobre la calle Julio Correa al 295 y ya en este año se habilitó la tercera franquicia en RI6 Boquerón al 589 esquina Pacheco.
El nuevo local, que también se trata de una franquicia, tiene la particularidad de que aparte de los tradicionales productos que ofrece la cadena, ofrecerá al público consumidor varias picadas que no están incluidas en el menú de los otros locales, razón por la cual se denomina Medialunas Calentitas Bistro, merced a una negociación especial en el marco de la franquicia.
Entre las picadas figura una Picada Tricolor que incluye: mbejucitos, butifarritas, besitos, morcillitas, picañitas, mandioquitas a la Provenzal. La Picada del Bistro lleva cebolla caramelizada, dados de cerdo al limón, dados de picaña, dados de pollo crujiente, tiras de pimiento a la plancha, dados de bife de chorizo, variedad de 3 chorizos, sopa paraguaya, mandioca a la Provenzal.
También hay una Picada de Punta que contiene: rulos de salmón ahumando, langostinos apanados, rabas al ajillo, mejillones con la cascara al vino blanco, papines salteados, vegetales al vapor. La Picada de 3 carnes ofrece: dardos de cerdo apanados acompañados con una salsa del bistró, pollo a la milanesa con semilla de sésamo, dados de bife de chorizo, papines salteados a las finas hierbas, mix de verduras al vapor, papas fritas a la Provenzal, mollejitas especiadas.
No podía falta por supuesto, una Picada Vegetariana que incluye: zuchinis, berenjenas y locotes de tres colores grillados, brócoli, zanahoria y colifror al vapor, tomates confitados con albahaca y ajo, rodajas de muzzarela a la milanesa, papas fritas a la Provenzal. Todas las picadas vienen en porciones para dos personas y los precios oscilan entre los 94.500 guaraníes de la Picada Tricolor y los 142.000 guaraníes de La Picada de Punta.
Estas picadas constituyen toda una novedad ya que Medialunas Calentitas es una marca creada con vista al desayuno y la merienda, atendiendo a que la mayor parte de sus productos se elaboran con masas que se dirigen a satisfacer esos horarios de alimentación. Pero ahora, también aparte de lo mencionado incluyen algunos combos de almuerzo. Debemos recordar que el nuevo local tiene un horario de atención de 07:00 a 22:00.
La oferta habitual de los locales de Medialunas Calentitas incluyen los siguientes productos: medialunas, tartaletas, masas y facturas, tartas dulces, tortas, empanadas, sándwiches, calzones, pizzas. Tiene un surtido y completo servicio de cafetería. Medialunas Calentitas se caracteriza por la elaboración artesanal de productos finos de panadería y confitería. Sus elaboraciones tienen fórmulas y procesos exclusivos.
En su nuevo local, de Cruz del Defensor y Eduardo López Moreira, utilizaron adecuadamente la antigua vivienda del lugar para convertirlo en un ambiente cálido y familiar, en dónde la informalidad resalta por la sencillez del amoblamiento y el colorido de las paredes que dan un toque juvenil a los ambientes. Tiene un amplio salon bajo techo y un gran espacio exterior que se une a una pequeña galería.