Madrid, es una de las capitales del mundo más afectadas por la pandemia de coronavirus. Allí viven miles de paraguayos. Uno de ellos incluso murió a causa de la epidemia. El chef compatriota Catalino Gabriel Garay que en enero pasado fue nominado como uno de los 50 creadores latinoamericanos destacados en la capital española, nos cuenta en esta nota las peripecias que están pasando a causa de la pandemia mundial.
Catalino es oriundo de la ciudad de Caaguazú, donde todavía viven sus padres. Llegó a Madrid en el 2004 y comenzó a trabajar en un restaurante. Estaba trabajando en el Hotel Eurostars Madrid Tower, un establecimiento cinco estrellas. Es el fundador del Club de Cultura y Gastronomía Paraguaya en España. A través de esa institución creó la ruta de la sopa paraguaya en España. Trascribimos a continuación la conversación que mantuvimos con él, vía wasap.
¿Cómo son tus días en Madrid. Podrías describirme hora por hora desde que te levantas?
Pues, me levanto a las 09:00, saco a los perros a pasear, luego tomo mate viendo las noticias, desayuno y de ahí paso al ordenador por qué estoy preparando una programación de curso de cocina básica y creativa para un curso que posiblemente voy a dar. Luego preparo tereré y entro en la cocina. Hago una transmisión en directo por Facebook para interactuar con la gente, yo cocinando, dando consejos.
Y paso recetas de salados al mediodía. Por la tarde, hablo sobre postres sencillos y baratos que estén al alcance de todos los bolsillos. Hay tiempo en donde leo nuevas técnicas culinarias. Ahora empecé con el libro Tembi´u Paraguay de Josefina Velilla de Aquino y luego paso a Poytava de Graciela Martínez.
¿Dónde vivís en Madrid. Pueden moverse libremente en la ciudad?
En Madrid vivo a 10 minutos del centro. Ahora no podemos salir, sólo para ir a la farmacia, supermercados y sacar a los perros. Y para ir al trabajo, si seguís trabajando y no podés hacerlo mediante teletrabajo. La Cámara de Comercio facilita un certificado de trabajo que dice que solamente puedes desplazarse al trabajo y del trabajo a la casa.
¿Cuál es tu situación laboral actualmente?
Los horarios se nos dan una semana antes. Tenemos tres turnos de 07:00 a 15:00, de 15:00 a 23:00 o de 20:00 a 02:00, y todos trabajamos en horarios fijos o rotativos. A partir del 9 de marzo empezó el desastre. Yo tenía toda la semana cubierta con 40 horas de trabajo. Ese día me llamó mi jefa me dijo las cosas estaban mal y que me iban a cambiar los horarios. Me pasaron uno nuevo con solo 22 horas de trabajo semanales y luego me volvieron a llamar para cancelar el horario y ahora trabajo ocho horas entre el viernes y el sábado.
Yo soy un trabajador sub contratado, por una Empresa de Trabajo Temporal que se conoce por ETT. Con la empresa del hotel llevo trabajando poco más de 4 años, soy como un extra fijo con 40 horas semanales de trabajo y también voy como refuerzo cuando tenemos eventos en el hotel que se computan como horas extras. La liquidación se hace todos los meses y mi paga incluye vacaciones, plus por transporte, etc.
¿Qué pasa si te enfermas. Tenés seguro?
Todos los meses se paga la seguridad social que te descuentan de la nómina y de ahí tengo la cobertura sanitaria. Ahora tengo que gestionar las documentaciones para ir al paro para cobrar el desempleo. Se calcula cuatro meses por año y yo tengo casi para cobrar dos años. Nunca entré al paro.
¿Como ves tu futuro en estas condiciones en Madrid?
Si esta pandemia pasa rápido yo tengo muchos trabajos gracias a Dios. Puedo entrar a los restaurantes. Sólo que poco respetan las leyes. En vez de trabajar ocho horas al día trabajas 10, por ejemplo. En vez de 40 horas semanales trabajas 50 a 55 horas. Son 15 horas no cotizadas. En cambio con las empresa de ETT, horas trabajadas horas pagadas y cotizadas. Ahora que tengo éste proyecto de enseñar me animo y puedo compaginar con otros trabajos.
Esta fea la situación en Madrid. ¿Tenes miedo?
Miedo no, pero sí soy consciente de la situación, por eso me quedo en casa, así me protejo a mí como a los demás.
¿Te entran ganas de volver?
Cuando me enteré que las fronteras se cerraban me sentí con bajón tremendo diciendo que por primera vez me siento aislado de mi familia, tanto de Paraguay como de mi hermana que vive en Barcelona, porque no podemos salir de Madrid, si viajas tenes que justificar si te agarra la Policía. Pero la tecnología nos une.
¿Te comunicas con los compatriotas allá?
Si, con los compatriotas tenemos un grupo de amigos en el whatsapp y nos contamos día a día nuestras luchas. Y con mis hermanas, una está en Barcelona y la otra en Buenos Aires.
¿Qué fue lo peor que te contaron que les pasa con esto del coronavirus?.
Lo más triste o fuerte, es el caso de uno que está sin documentación. Llegó hace cuatro meses hacía changas y tiene que pagar sus deudas. Ahora con este coronavirus ya se le está acumulando la deuda en su apartamento y no se puede escapar de eso. Cuando escuchas esas cosas se te cae el alma por el suelo sin poder hacer nada.
A muchas personas conocí en esa condición, algunos me preguntan cómo está por acá porque quieren venir. Yo soy muy sincero y directo digo lo que hay, ya cada uno es libre de elegir su camino. Esperanza de trabajo casi no doy sin documentación. Está la Iglesia y las ONG’S que toman personas sin documentación. Más posibilidades tienen las mujeres que los hombres.