La pregunta tiene un doble filo. Primero, que ubicación tendrá tras abandonar la esquina de Palma y Chile y segundo, que futuro le espera al negocio ya que su icónica locación es un factor primordial en la obtención del éxito comercial. La primera incógnita está despejada. Se ubicará en la esquina de El Paraguayo Independiente e Independencia Nacional en cruz con La Catedral de Asunción en un nuevo y moderno edificio.
Hasta fin de mes el Lido Bar ocupará el inmueble frente al Panteón Nacional de los Héroes. Hasta tanto irá realizando la mudanza. Después de 70 años cambiará de local debido a que no llegaron a un acuerdo sobre el precio del alquiler con el propietario del inmueble. Lido Bar paga alrededor de 100 millones de guaraníes. Ocupa la planta baja, el entrepiso, el primer piso, el tercer piso y parte del segundo del edificio ubicado en Palma esquina Chile.
Los propietarios del Lido Bar sostienen que ya no están en condiciones de solventar ese costo, más aún, teniendo en cuenta la merma que tuvieron en las ventas. Sigrid Forster, gerente del local manifestó que están muy felices porque se mudarán a un local en pleno centro de la ciudad, muy cerca de donde están actualmente. “Hay Lido Bar para rato”, expresó muy optimista.
El problema del alquiler surgió en octubre del 2020 cuando los propietarios anunciaron que habría una suba. Hubo negociaciones, pero no hubo acuerdo. Luego sobrevino la pandemia y la situación económica de El Lido Bar se complicó. Y ahora los propietarios del local decidieron mudarse. El propietario del inmueble, Carlos Alberto Bittar nos dijo que trató de retenerlos y pidió que hicieran una oferta que se acercara a sus pretensiones. Pero la suerte ya estaba echada. “El tema del alquiler no puede ser un inconveniente para un local que factura 150 millones de guaraníes por día. Es lo de menos”, dijo el propietario.
El edificio que pasará a ocupar el Lido Bar es una flamante edificación de dos pisos con grandes ventanales hacia las calles El Paraguayo Independiente e Independencia Nacional. No pudimos acceder al local, pero intuimos que en planta baja tiene un amplio salón donde presumimos que se instalará la clásica barra circulación que caracteriza al Lido Bar. Anteriormente, ese lugar estaba ocupado por una dependencia de la Policía Nacional. El inmueble pertenece al Ateneo Paraguayo.
Lido Bar es una marca gastronómica que imaginariamente nos transporta a dos rumbos. Por un lado, uno piensa en sus productos, en el famoso pira caldo o algunas de sus empanadas. Por otro lado, también es una referencia histórica geográfica. Uno se remite automáticamente al edificio de la esquina de Palma y Chile, ubicado frente al Panteón Nacional de los Héroes. Disfrutar de la “experiencia Lido Bar” no es solo consumir algún plato sino pisar el lugar, respirar el aire de historia del que uno se impregna en el sitio.
La esquina de Palma y Chile es el punto cero de la ciudad y una intersección por donde pasan miles de transeúntes y vehículos al día. Es decir, una locación donde se puede obtener una clientela de paso por la elevada circulación que tiene. Estos factores positivos ya no tendrán el Lido Bar a su disposición cuando pase a ubicarse en cruz a La Catedral. A su favor, juega que tendrá un local más cómodo para conjugar la producción con el servicio. Estará frente a una plaza y con espacio para el estacionamiento de vehículos.
¿Qué va a pesar más en el futuro del Lido Bar? ¿La locación o la calidad del producto? Solamente el tiempo determinará si podrán mantener sus niveles de facturación. De todas maneras, descontamos que mantendrán el nivel de sus platos. Ya demostraron que son capaces de eso con la sucursal que habilitaron en la Manzana T, en el barrio Villa Morra. Mientras tanto ya se hacen conjeturas que nuevo inquilino tendrá la esquina de Palma y Chile. A nivel de chismes, se comenta que podría ser una sucursal de Empanadas Don Vito.