De todo se viene probando en nuestro mercado gastronómico. Pero este rubro, nadie lo había explotado a pesar de ser un producto muy conocido y consumido. No tanto, como las empanadas, pero desde hace un año una empresa trata de abrirse campo poniendo a consideración unas croquetas de buena calidad y excelente variedad.
Un cliente pide la carta en un restaurante. Y al ver la lista de platos, se siente atraído por todos y no sabe cuál pedir. Entonces, le llama al mozo y le pregunta ¿cómo podía hacer para probar un poco de todos los platos? Pida croqueta, fue su respuesta.
“Ese no es nuestro caso”, dijo tajantemente Estela Troche de Escauriza ante el chiste. Ella es una de las responsables de Croqueteando, una empresa de reciente creación que desde hace un año está comercializando ese producto en nuestro mercado, que arrastra sobre sí el prejuicio que se menciona en el chiste. Si bien es cierto que se trata de un alimento de mucho consumo, no ocupa todavía, los primeros lugares en las preferencias de los paraguayos, como es el caso de las empanadas, por ejemplo.
“Nunca nadie vio el nicho. Uno de los socios planteó la idea y se fue desarrollando. Buscábamos algo que pueda entrar con fuerza y que la gente pueda optar por nosotros. En otros países se están usando mucho”, agrega Estela, quien junto a Oscar Ibarra y Andrés Borgognon es socia propietaria de la novel empresa. “Parece que había un poco de temor por trabajar con tanta variedad de croquetas, porque se hacían solamente las de carne. Nosotros tenemos todos los sabores”, sigue diciendo.
Croqueteando es una pequeña industria. Tiene una fábrica en el barrio Las Mercedes donde producen croquetas congeladas. El lugar no está acondicionado para consumir allí sino que es más bien para un take away. Recientemente habilitaron sobre 25 de Mayo, un espacio donde también las venden cocidas y los clientes pueden sentarse a consumirlas en un pequeño y coqueto local gastronómico.
Hay trece variedades en tres presentaciones. Los gustos son Carne, Carne Picante, Pollo con Curry, Pollo con Cheddar, Jamón y Queso, Mandioca, Corazón de Catupiry, Acelga con Zapallo, Queso con Pepperoni, Frutos de Mar (camarones, pulpo, calamar), Surubi con Kanikama, Risotto al Funghi y de Cabrito. Ya tienen desarrolladas otras ideas sobre gustos que se irán lanzando de acuerdo a las temporadas.
Las croquetas vienen en presentaciones de 130 gramos, que cuestan 8.000 guaraníes cada una. En presentaciones de 60 gramos, nueve unidades en caja de tres, que cuesta 30.600 guaraníes y una versión de 30 gramos en caja de 24 unidades tipo bocaditos y seis gustos diferentes que tiene un precio de 40.000 guaraníes. Los productos de Croqueteando se pueden encontrar en casi todos los supermercados y almacenes mayoristas.
Las croquetas congeladas son para ser cocinadas al horno. Están pre cocidas y como tiene suficiente materia grasa, una vez horneadas adquieren el dorado y la crocancia que necesitan. “Yo no aconsejo fritar, porque no es tan fácil, tiene un alto contenido de queso y generalmente cuando el calor alcanza el centro de la croqueta, explota. Además, no es aconsejable fritar por una cuestión de salud”, acota Estela.
La pequeña fábrica de Croqueteando está trabajando al 20% de su capacidad pero esta diseñada para una producción de gran volumen. Precisamente allí entra en escena Estela Troche de Escauriza para hacer un producto industrial ya que ese es su fuerte. “Hace 12 años yo comencé con los productos congelados pero no era aún el momento”, nos cuenta. Ella tiene una experiencia de 25 años en la gastronomía. Egresada del Cordon Bleu en Lima, Perú, dedicó casi toda su vida al asesoramiento gastronómico. En ese carácter solicitaron su concurso en Croqueteando para reemplazar a su colega Natalia Dos Santos, quien había iniciado el proyecto.
“Al poco tiempo me invitaron a formar parte como socia. Para mí fue como la guinda de un postre, un regalo a los años de perseverancia en esta profesión. Cuando vi el proyecto dije que es ganador, cuesta hacer algo diferente. Con esto vamos a salir adelante. Soñamos incluso con exportar y la verdad es que no tenemos definido si vamos a crear locales propios o vamos hacer franquicias. Hay que abrir varios puntos de venta para que vaya pegando fuerte. Estamos creciendo gracias al boca a boca, una vez que el cliente nos conoce, ya nos es fiel. Gusta mucho porque se trata de un producto de buena calidad”, dice finalmente nuestra entrevistada.