El Lido Bar obtuvo una utilidad neta de 2.600 millones de guaraníes al año y paga en concepto de alquiler 1.200 millones de guaraníes en el mismo periodo. Así lo revelo el abogado Lino César Oviedo Marín, síndico de la citada empresa, en el marco de un litigio judicial acerca de las cuentas del negocio porque cree que las utilidades pueden ser más. Por otro lado, las actuales autoridades del local gastronómico confirmaron que el sector de producción se mudará del inmueble que ocupan en Palma y Chile.
Esta mañana amanecimos con la noticia que el Lido Bar estaba en medio de un gran pleito judicial. En junio del año pasado, Oviedo Marín denunció a Estherlinda Bazán (gerente y accionista), María de Lourdes Mansito (contadora) y María del Carmen Portillo (tesorera) por los delitos de apropiación y estafa, entre otros. En su carácter de síndico Oviedo Marín (a la vez es accionista) no había aprobado los últimos balances.
En medio de las confrontaciones entre las partes, Oviedo Marín declaró a Radio ABC Cardinal, que los accionistas se distribuyeron unas utilidades de 2.600 de guaraníes, en el último ejercicio aprobado. Y también confirmó que el alquiler que pagan por el local ubicado en Palma y Chile, es de 100 millones de guaraníes, según lo había revelado elomnivoro.com en una publicación anterior. Entre otras cosas dijo que existe una caja negra paralela y que las ganancias podrían ser mucho más.
En otro orden de cosas, el abogado también hizo referencia al funcionamiento gastronómico de El Lido Bar. “Ese edificio es una pocilga, no tiene todas las reglas de prevención contra incendios, la comida que manipulan pasa por el ascensor. Esta denuncia de mal manejo es contra los socios y podríamos mejorar enormemente la situación de los trabajadores, no se imaginan lo sucio que es el cambiador que ellos utilizan”, expresó.
Sobre este punto, hace algunos días conversamos con las actuales autoridades del Lido Bar y confirmaron que es un hecho de que todo el sector de producción de alimentos se mudará de Palma y Chile, para ubicarse en un inmueble cercano, aunque no confirmaron aun la locación. El tema del alquiler sigue en estado de negociación sin una definición concretan. Habían solicitado al dueño de la propiedad que no aumente el precio, fijado en 100 millones de guaraníes.
El Lido Bar es actualmente propiedad de siete socios. Ellos recibieron gratuitamente las acciones de la empresa de parte de los creadores y originales propietarios, la pareja alemana Enrique Schulz y Elizabeth Schulz, como un reconocimiento al servicio prestado durante muchos años. La más antigua funcionaria Estherlinda Bazán (46 años de servicio) recibió mayor cantidad de acciones y Cristina Dose, la primera era gerente del local del centro y la segunda gerente en el local de la Manzana T. Estherlinda ya no es hoy la gerente, esa función está siendo ejercida actualmente por Sigrid Foster.
También recibió acciones Lino César Oviedo Marín, hijo del fallecido general y líder político Lino Oviedo Silva. Inicialmente fue contratado como abogado con la excusa de que por la influencia de su padre podría resultar en una protección política. Cuando recibió su parte de las acciones se desempeñó durante un tiempo como administrador del Lido Bar y posteriormente se desempeñó como síndico. Desconocemos el nombre de los demás accionistas pero se trata de ex empleados de la pareja alemana.
En el caso judicial que hoy afecta al Lido Bar, hay acusaciones recíprocas de ambas partes, con graves denuncias acerca de uso de influencias políticas en el desarrollo del proceso. Mientras tanto, el local gastronómico sigue funcionando normalmente, en sus dos locales, el céntrico ubicado en Palma esquina Chile y el segundo situado en la Manzana T, en el barrio Villa Morra.