No solo porque explotaban los churros que los concursantes tuvieron que preparar para ver quién iba a su casa, sino sobre todo por la decisión del jurado. En el mano a mano final quedaron Armando y Kiki porque hicieron los peores platos. Entonces el jurado decidió hacer un desempate. Y en una prueba con huevos fritos se eliminó Armando y Kiki se salvó raspando.
Armando, Kiki, Nancy, Tattiana y Sara quedaron para la prueba de eliminación después de una prueba por equipos en donde lograron subir al balcón de salvación: Vero, Diego y Fernando. Jorgelina también tuvo que haber ido a eliminación pero por un problema de salud de última hora no pudo participar de la segunda parte del programa y el jurado decidió que automáticamente en el próximo programa irá a ronda de eliminación.
La consigna eliminatoria fue la de preparar churros rellenos con dulce de leche. Antes de la prueba, Rodolfo Angenscheidt advirtió a los concursantes de que si no se tenían cuidado en la preparación de la masa, ésta podía adquirir aire y que en contacto con el aceite caliente podía generar explosiones. Efectivamente, ocurrió lo previsto. Y el que más sufrió fue Armando, incluso tuvo suerte de no haberse quemado con el aceite caliente que salpicó por todos lados. También Tattiana sufrió los mismos efectos y sufrió unas leves quemaduras en la frente.
Kiki estuvo realmente desconocida. No le agarró el punto a la masa y se enredó con ella. Si bien no tuvo que soportar explosiones, su preparación se deshacía en el aceite caliente. Era la primera vez que preparaba este plato. En su descargo, podemos decir que se incorporó al programa luego de una internación de seis días en un sanatorio. Al final, Nancy y Tattiana hicieron los mejores churros. Sara también se salvó y tuvo derecho a subir al balcón.
Los peores churros fueron los de Kiki y Armando. La primera presentó unos churros muy grandes y con una notoria falta de cocción. Nada que ver con sus anteriores presentaciones. Armando, pese a los graves problemas que tuvo no se entregó y logró presentar unos churros a los que no logró ponerle el relleno de dulce de leche pero los embadurnó por fuera como último recurso. Era bastante difícil decidir quién debía abandonar las cocinas de MasterChef. Y el jurado optó por una nueva decisión salomónica. Realizó un desempate.
Para ver quién se eliminaba sometió a Kiki y a Armando a una prueba para ver quién hacía los mejores huevos fritos en diez minutos. Los otros concursantes que desde el balcón seguían la prueba, calificaron que la decisión del jurado fue un salvavidas para Kiki y coincidieron en que ella debió ser eliminada. Claro que, esta actitud estaba contaminada por el hecho de que Kiki es la que peor cae en el grupo y además es una contrincante peligrosa a la que todos querrían ver eliminada.
En fin, Kiki hizo 11 de los 10 huevos que debía preparar, algunos buenos y otros malos. Armando apenas completó 7, también con algunos buenos y otros malos. La mayoría de los huevos estaban reventados y la consigna era presentar yemas jugosas, claras bien cocinadas. Solo juzgaron el aspecto y no hubo degustación. Y la decisión de quien debía dejar las cocinas de MasterChef recayó en el representante de Coronel Oviedo. Como bien el mismo lo dijo, hace una semana había tocado el cielo cuando volvió nuevamente al programa en el repechaje, ahora volvía a su casa.
Viendo las últimas flojas actuaciones de Kiki, el ranking de candidatos a ganar la segunda edición de MasterChef la ve más alejada de la punta. Para nuestro gusto, encabeza las posiciones Vero, quien tras su transitoria eliminación (volvió la semana pasada con el repechaje) es consciente de que otro error garrafal puede dejarla afuera. La segunda es Nancy, quien domina la cocina tradicional paraguaya y le hace frente a todos los desafíos con otro tipo de cocina. Kiki aparece en tercer lugar luego de destacarse como una de las mejores. Este trío es el lote de principales candidatos.
Luego siguen Fernando, quien es muy prolijo y rendidor. Siempre está en el medio de la tabla. Pero tendría que dar una sorpresa para llegar más arriba. Siguen Tattiana, Sara, Jorgelina y Diego, todos con severas limitaciones gastronómicas. Este comentario se encuadra dentro de consideraciones lógicas, pero un mal día puede costarle caro a cualquiera de los participantes. Además ahora, hay que considerar que el jurado comenzó a tomar decisiones inéditas, ya van tres oportunidades, que agregan cierto nivel de incertidumbre programa tras programa.