Tal cual estaba previsto, María Liz Ocampos ganó la primera edición del MasterChef Paraguay. Desde muchos programas atrás ya venía erigiéndose en la gran candidata. Y también como estaba previsto, en segundo lugar quedó Diego Brítez, cumpliéndose una lógica casi estricta. María Liz se hizo acreedora de un premio de 50 millones de guaraníes. Y sin parar, la próxima semana se inicia ya la segunda temporada del popular programa.
TODO MUY LÓGICO. Quién podía ganar sino María Liz. Desde un comienzo fue la que mejor pintaba seguida por Diego que fue creciendo a medida que avanzaba el programa. Anoche, la tercera en discordia fue Isabel. Pero estaba cantado que su talla no daba para estar en la final. El duelo definitivo entre María Liz y Diego se encuadró también dentro de los parámetros lógicos. Ella, disciplinada, meticulosa y ordenada, mientras que él más creativo, atrevido pero muy desordenado.
María Liz recurrió a platos muy sencillos para nada impactantes. Diego en cambio fue más innovador, más jugado. En la prueba decisiva debieron preparar una entrada, un principal y un postre. En lo primero ella presentó unas bolitas de mandioca rellenas de queso Paraguay con una crema de pepino y yogurt. Diego se inclinó por un carpaccio de res. En este plato, el ganador indudablemente el ganador fue Diego.
En el principal María Liz optó por un pollo envuelto en panceta, con una crema de puerros y vegetales al horno. Diego eligió una cazuela de surubí con salsa de puerro y roquefort con colchones de papas y vegetales. Este último, parecía una receta más atractiva pero su realización tropezó con algunas dificultades. Si bien ambos platos pasaron las pruebas de sabor la cazuela de Diego parecía más bien un pastelón. Y los colchones de puré de papas y el de vegetales estaban ocultos dentro de la cazuela y no aportaban nada para la vista. María Liz con un plato más sencillo, ganó para nosotros esta evaluación.
Para el postre, María Liz presentó una Crème brûlée con Cedrón Paraguay y yerba mate, mientras que Diego hizo un suspiro limeño. Si bien ambos platos satisficieron por igual al jurado, el hecho de que María Liz haya optado utilizar ingredientes nacionales para elaborar un postre clásico francés le dio un toque original a la propuesta y a nuestra consideración le valió para que su postre sea el mejor. Y para que ganara el título de Primer MasterChef de Paraguay.
DOS HORAS EN 7 MINUTOS. María Liz y Diego tuvieron 120 minutos para completar los platos de la prueba final. Esas dos horas se resumieron en 7 minutos de pantalla. Este tiempo fue todo lo que pudimos ver del accionar de los concursantes. No da para que el espectador tenga una idea más o menos acabada de cómo los competidores llevan a cabo sus preparaciones. Por eso, la mayoría de las veces, las preferencias del público se basan en argumentos emocionales antes que profesionales.
LO MAS PRECIADO. Como ganadora de la primera temporada de MasterChef, María Liz recibió como premio un cheque de 50 millones de guaraníes y vaucher para un curso completo de cocina durante tres años en el IGA. También recibió un trofeo, un pequeño obelisco de cristal que la acredita como la primera MasterChef Paraguay. Para Diego Brítez, que quedó en el segundo lugar, solamente se destinaron las felicitaciones y las gracias.
¿EN VIVO? A las 23:25 la presentadora Paola Maltese anunció que estaban transmitiendo en vivo. Allí invitaron a que tomen parte del programa a los ex participantes y a los familiares de los finalistas para la ceremonia final. No nos explicamos por qué esta invitación no se hizo desde el momento en que comenzó el duelo final entre María Liz y Diego, como se estila en los programas de otros países.
Y VA LA SEGUNDA. Una de las sorpresas de la noche fue el anuncio de que la segunda temporada de MasterChef Paraguay comenzará la semana próxima, sin ningún intervalo con la primera. Por algunas informaciones, que hemos podido recabar, la nueva temporada tendrá competidores con un mayor nivel de conocimiento en gastronomía. Seguramente, han mejorado el mecanismo de selección, ya que en la primera temporada fue muy bajo el grado de preparación en cocina que exhibieron los postulantes.