Anoche, en la jornada de eliminación de MasterChef, la papa frita, fue una complicación que ninguno de los cinco participantes cumplió a cabalidad. Y, sin embargo, cumplieron razonablemente con la misión de cocinar el plato principal que consistió en un “Pato a la naranja”. Gabriel Colmán, 46 años, productor de música, de Villa Elisa tuvo que abandonar las cocinas del programa, porque el jurado, en fallo dividido, eligió su plato como el peor de la noche.
Jazmín, Santiago, Lucata, Sofía y Gabriel llegaron a la ronda de eliminación porque la noche anterior no pudieron superar satisfactoriamente la prueba consistente en la preparación de pizzas de varios gustos. Después de la sencillez de semejante prueba, el programa decidió levantar las dificultades y propuso como consigna la elaboración del “Canard à l’orange”, un clásico de la cocina francesa. Y dando una vuelta de rosca más, pidió un acompañamiento con dos formas de papas fritas: papas a la inglesa y papas soufflé.
El pato a la naranja es un plato de restaurante, pero con muy pocos adeptos en nuestro país. No es un plato que se cocine en los hogares. Pero, no tiene muchas complicaciones su preparación, solo hay que lograr el punto exacto de cocción, tiene que estar jugoso. Se cocina a la plancha, al horno o con una combinación de ambos. Casi todos cumplieron con esta parte de la prueba y seguro que las diferencias se habrán notado en el sabor y la textura de la salsa.
Las complicaciones vinieron a la hora de las papas fritas. Las especialidades exigidas no son comunes en nuestro mercado, donde se prefieren las tradicionales papas fritas finitas y alargadas. Las papas inglesas son como unos bastoncitos mas gruesos y las papas soufflé toda una rareza. Son como unas pelotitas de papas infladas de aire. Las papas se cortan en láminas muy finas que se fritan en aceite y luego de retiradas y pasadas por papel absorbente, una vez que se enfrían se vuelven a freír y allí se hinchan de aire.
Ninguno de los participantes cumplió con la consigna de las papas soufflé y hubo muchos problemas con las papas inglesas. Durante la realización de la prueba, los miembros del jurado José Torrijos y Rodolfo Angenscheidt se acercaron a las mesas de trabajo de los concursantes para mostrarles como debían hacer los cortes de las papas. A la hora de la evaluación de los platos, los miembros del jurado aclararon que como nadie pudo presentar en forma las papas soufflé, esta guarnición no fue considerada para la clasificación final.
En el momento, en que Rodolfo estaba haciendo sus consideraciones acerca del plato de Sofí, expresó que el único que había logrado el punto en las papas inglesas fue Santiago Canuto, quién también estuvo a punto de obtener las papas soufflé, pero le faltó temperatura en la segunda cocción. No sabemos si por esto, o por otras razones, por decisión unánime del jurado del plato de Canuto fue calificado como el mejor de la noche y fue el primero en subir al balcón.
Por decisión unánime también subieron al balcón Sofí y Jazmín, en ese orden. Ambas no querían creer que Canuto les había superado. Quedaron en el paredón de fusilamiento Gabriel y Lucata, dos concursantes que siempre están rondado la eliminación. Ambos platos parecían un desastre, mal presentados y con unas papas que no se entendía que eran. Los patos estuvieron bien trabajados, situación que llevó al jurado a tomar una decisión dividida. El eliminado fue Gabriel pero se desconoce el sentido del voto de los miembros del jurado.
En esta última jornada, el jurado quiso poner un poco más de dificultad a los participantes que hasta el momento vienen compitiendo con pruebas de platos muy sencillos y modestos, que evidentemente no son dignos de un concurso de esta envergadura. Imagínense que el ganador llevará el título de MasterChef, un título y una distinción que les quedará grande a todos ellos. Siguen todavía, en competencia Martita, Shosiana, Sofí, Víctor, Canuto, Jazmín y Lucata. En ese orden de importancia para nosotros.