De izquierda a derecha, aparecen Jessica Torres, Gustavo Cabaña y Karina Grau.
Ellas clasificaron anoche para la final en una reñida disputa que se decidió solamente
por los detalles.
Indudablemente, las dos mejores participantes se clasificaron para la final del MasterChef Celebrity. Jessica Torres y Karina Grau se enfrentarán en la final del concurso de cocina. En el camino quedó Gustavo Cabaña, quién era el tercero en discordia. La definición se decidió por pequeños detalles en la elaboración de los platos, luego de un primer intento en que ninguno de los tres pudo aprobar por defectos en la presentación.
El lunes pasado debió elegirse ya a las personas que deberán enfrentarse en la final, pero ninguno de los tres candidatos cumplió la consigna de elaborar una torta Red Velvet. Todos tuvieron defectos en la preparación por desconocimiento de las técnicas y de los tiempos de cocción. La definición pasó para la noche de ayer con el resultado de la eliminación de Gustavo Cabaña.
Se eligió para la competencia una prueba con escaso nivel de complejidad, tal vez para que no ocurra lo del programa anterior. La consigna era cocinar un corte Tomahawk de carne vacuna (para honrar a la mejor carne del mundo), acompañado de una tortilla de papas, un chipa guazú y una guarnición que quedaba a la libre elección de los participantes.
La presentación de los platos, de acuerdo a lo que se podía observar a través de las pantallas televisivas, mostraban que tenían un nivel muy parejo y que a diferencia de la jornada anterior, todos lograron cumplir la consigna. Los miembros del jurado casi no hicieron devolución de las presentaciones y era muy poca la conclusión que podía sacarse tras la cata que hicieron.
La decisión final del jurado arrojó como resultado que el mejor plato fue el presentado por Jessica Torres y la segunda clasificada fue Karina Grau. La aclaración que hicieron los miembros del jurado fue que la decisión fue muy ajustada y que se decidieron por algunos detalles.
José Torrijos, uno de los jurados, explicó que en cuanto al corte de carne Tomahawk, todos los participantes cumplieron en presentarlo con la cocción y sabor correctos. Euge Aquino, detalló en cambio las diferencias que hubo en la chipa guazú y en las guarniciones, que fueron finalmente los detalles que tuvieron en cuenta para la eliminación.
Karina Grau acompaña su Tomahawk con una guarnición de berenjenas al Romescu, mientras que Jessica Torres presentó risotto rosa de coliflor. Gustavo Cabaña en cambio llevó a la mesa una simple ensalada alemana de papas, que fue lo que seguramente lo dejó definitivamente fuera de la disputa por el título.
Euge mencionó que una de las chipa guazú se diferenció del resto, por su cremosidad y por su sabor casero, sin mencionar por supuesto a quién correspondía dicha elaboración. Luego se refirió a la guarnición diciendo que una se destacó por su complejidad y por su técnica de elaboración. “Buena elaboración, buena opción, bien lograda”, dijo dejando nuevamente en la incógnita la autoría.
Suponemos que se refería al risotto rosa de coliflor presentado por Jessica Torres, que a primera vista parece que encaja con la descripción de Euge. Aunque también tuvo elogios para otra guarnición, “agradable en lo visual, una buena salsa”, que se puede asociar a las berenjenas con Romescu que presentó Karina Grau. En esta reseña, el plato de Gustavo Cabaña solo fue referido por la simpleza del acompañamiento.
Para la final, habrá que ver con qué pruebas se encontrarán las finalistas. Normalmente, las finales de MasterChef suelen ser más complejas. Con mayor número de tareas. Pero como las participantes fueron elegidas por ser celebridades, no por ser cocineras aficionadas o profesionales, es probable que el nivel de dificultad sea más reducido. La definición está abierta y el título puede corresponder a cualquiera.