Nicky Stockl, el parrillero de Loma Plata, Chaco, ganó anoche la semifinal del programa Amos del Fuego y se enfrentará en la final del torneo, a Gustavo Barrios, quién fue segundo y a Diego Brítez, clasificado en tercera posición. Nicolas Casabianca, fue el eliminado de la competencia. La final será el 30 de junio y por primera vez, el programa televisivo, se transmitirá en directo. (En la foto de arriba, Gustavo Barrios, condimentando el costillar de cerdo ahumado)
Amos del Fuego, que se transmite por Canal 9, los domingos a la noche, tiene por objetivo elegir al mejor parrillero del país. La búsqueda no solo tiende a encontrar al que mejor cocina las carnes a la parrilla sino también al que mejor lo presenta y lo acompaña de guarniciones. A lo largo de los 12 capítulos ya emitidos, el programa realizó una decantación casi natural, quedando estrictamente los mejores, gracias a la excelente tarea de los dos jueces del torneo: Colaso Bo y Leyzman Salim.
Anoche, el ganador fue otra vez el chaqueño Nicky. Fue el vencedor en los tres últimos capítulos. Y su performance muestra como viene desarrollándose el programa a lo largo del tiempo. Al comienzo, la novedad era que el asado debía tener una buena presentación en el plato y ser acompañado de las mejores guarniciones. Fueron quedando por el camino, los que tenían poca afinidad con esta nueva forma de encarar el trabajo de un parrillero.
En los últimos programas, se fueron complejizando las exigencias técnicas de las consignas. Debían cocinarse varios tipos de proteínas, lo que exigía una mayor atención a los tiempos de cocción, técnicas y puntos de cocción. La presentación y las guarniciones ocupaban los planos secundarios como correspondía en una competencia de asado.
La consigna de anoche mostraba lo que decimos. Los cuatro que habían llegado a semifinales: Diego, Gustavo, Nicky y Nico, debían cocinar, dos cortes Tomahawk, uno en un punto medio de cocción y otro a libre elección, con sus acompañamientos. Y un costillar de cerdo, en un ahumadero, también con aderezos y acompañamiento a libre elección. Tenían seis horas para terminar la tarea, pero a la tercera debían presentar los cortes de Tomahawk.
La atención principal estuvo puesta en el costillar de cerdo. Había que trabajar bien con el anillo del ahumado, la crocancia de la piel, el punto de cocción y por supuesto el sabor de la carne. El que mejor trabajo hizo al respecto fue Nicky, un parrillero acostumbrado al manejo del fuego ya que, en su Loma Plata natal, trabaja mucho con diversos combustibles, variados tipos de leña y carbón. Sabe sacar el punto justo de cocción y utilizar apropiadamente los ingredientes para resaltar el sabor de la carne, porque es de una zona en donde la producción de carne vacuna es uno de los fuertes.
En el otro extremo, se encuentra Diego Brítez un cocinero parrillero, cuyo fuerte está en el complemento y la presentación. Anoche, nuevamente hizo un show de guarniciones: zuchhini al pesto, berenjenas a la parmesana con salsa arrabiata gratinada, batatas con queso, vegetales glaseados, cebollita, zanahorias babys, coles de Bruselas y papas fritas con salteado de hongos con panceta y ajo. Así como Nicky se lució en los programas finales, Diego fue la estrella en los primeros programas.
En el justo medio, se ubica Gustavo Barrios, un profesional experimentado, perfil bajo, muy equilibrado en su trabajo, puede que no brille demasiado, pero es muy difícil que se equivoque. Ya obtuvo varios pines, entre ellos uno de oro. (Los pines, de oro, plata y bronce, se entrega a los participantes de acuerdo con su actuación en cada programa). Si Gustavo está en su día de gracia, puede rozar la perfección. Anoche fue el que preparó los mejores Tomahawk.
El eliminado Nicolás Casabianca, es alguien que sale fuera de los moldes. Es un absoluto aficionado a la parrilla. Creemos que no tuvo experiencia profesional alguna, pero es dueño de un gran conocimiento de la cocina en general. Fue el que hizo, durante el ciclo, las preparaciones más innovadoras y originales. Anoche, su Tomahawk libre con una costra de frutos secos recibió el halago de los jueces. Pero el punto medio de cocción que alcanzó también tenía que haber alcanzado el otro Tomahawk.
Lo mismo le pasó con el costillar de cerdo ahumado. Pintaba bien, tanto por el color que tenía y por los condimentos que utilizó. Pero al final, estuvo un poco crudo y eso fue descalificatorio. Le pasó factura su falta de experiencia y horas al lado de las parrillas.
La final se disputará el próximo 30 de junio y será televisado en directo. El programa como siempre se escenificará en el Hotel Sandivel, de la ciudad de San Miguel, Misiones. No existe mucha diferencia de capacidad entre los tres candidatos que llegan a la final. Cualquiera está en condiciones de coronarse como el mejor parrillero del país y aparte del título recibirá un importante premio en metálico.