Hace unos diez años, el vino uruguayo era casi un perfecto desconocido en el mercado paraguayo. La importadora Andina vendía un tannat de la bodega Pisano que era casi como una curiosidad. Cuando el restaurante Alma, comenzó a tener mucho éxito, tenía una bodega, con varias etiquetas uruguayas, gracias a que su propietario y creador era de esa nacionalidad. (En la foto de arriba, Fabiana Bracco exhibe una de las estrellas de la bodega BraccoBosca)

Cuando el crecimiento del mundo del vino en nuestro país obligó a extender las fronteras de los países cuyos vinos llegaban al nuestro, arribaron también las marcas uruguayas, sobre todo a caballo del tannat, el varietal insignia de los charrúas que al igual que otros tintos se apreciaban mucho para maridar con la carne paraguaya que por entonces despuntaba con excelencia.

Fue así como en el 2022 desembarcó en Asunción el Uruguay Wine, una parte de la marca país Uruguay al Natural, que funciona como paraguas para sectores específicos, como lo es la producción de vinos. Uruguay Wine es la organización que se encarga de promocionar el vino uruguayo en todo el mundo.

Llegaron al Paraguay, para presentar a sus bodegas, a sus empresarios y a sus productos. Se reunieron con los principales referentes locales, realizaron un masterclass para empresarios, importadores, dueños de restaurantes y sommeliers y finalmente organizaron la Primera Expo Uruguay Wine. Mucho se centró en el conocimiento de las bodegas que existen en el Uruguay y en la producción del tannat.

Volvieron al año siguiente, con las mismas ganas y ambiciones sin importar el nivel de satisfacción que lograron con las primeras visitas. De nuevo el encuentro con principales referentes, charla magistral y segunda Expo Uruguay Wine. Ya fue mayor el número de bodegas presentes, algunas incluso ya habían conseguido representantes locales y comenzaban a descubrirse algunas características especiales de los vinos uruguayos como por ejemplo eso de que son los únicos en el mundo que reciben la influencia climática del Océano Atlántico.

Un público nutrido y ávido acompañó la tercera edición del Expo Uruguay Wine realizado días pasados en el Hotel Sheraton. Los vinos uruguayos que se hicieron famosos por el tannat mostraron ahora sus buenas facetas con otros variedades de uva.

Este año volvieron a repetir la experiencia, y abrieron la posibilidad de que el público pudiera acceder a la Expo Uruguay Wine que antes estaba reservada para los invitados especiales. Ni siquiera tuvo mucha promoción, de que se cobraba una entrada de 180.000 guaraníes e igual hubo una pequeña multitud. El vino uruguayo se había ganado su propio público y conste que sus precios no son tan competitivos en el mercado local.

Para esta tercera edición, ya se podía corroborar la veracidad de muchas de las consignas marketineras que transmiten a la manera de promoción. La influencia del Océano Atlántico dota de una especial frescura a los vinos uruguayos. Posee inmejorables características para producir vinos de calidad porque está ubicado entre las latitudes de las mejores tierras cultivables de Argentina, Chile, Sudáfrica, Australia. Puede decirse que Uruguay es una tierra de vinos porque toda su superficie cuenta con óptimas condiciones para el cultivo de la vid.

La uva emblema es el tannat, con la cual han ganado premios internacionales pero en sus viñedos hoy en día pueden encontrarse decenas de variedades entre las que se destacan, entre otras, el merlot, cabernet Sauvignon, syrah, pinot noir y marselán, entre las uvas tintas y el Sauvignon blanc, chardonnay, viognier y albariño, entre las blancas.

Precisamente, los vinos blancos fueron la principal atracción en la última Expo Uruguay Wine que se realizó en el Hotel Sheraton. En especial, los blends de Albariño, tanto con Chardonnay y Sauvignon Blanc. Las nueve bodegas que se presentaron ofrecieron degustación de vinos que se caracterizaron por la pareja calidad de casi todas las etiquetas que estuvieron a disposición.

Los uruguayos sostienen que su producción de vinos finos no es solo producto de las características de su suelo y clima benigno, sino que tiene una raíz cultural. Las bodegas uruguayas fueron fundadas por familias europeas que décadas atrás migraron a Sudamérica. Hoy, casi todas esas bodegas siguen en manos de las familias fundadoras.

Uruguay es un país abierto e igualitario, con tradición de innovación y desarrollo que se basan en los siguientes índices. Número 1 en el Índice de Percepción de la Corrupción, Número 1 en índice de Prosperidad, Número 1 en nivel de Alfabetización de Sudamérica, Numero 1 PBI per cápita más alto de Sudamérica y una de las 20 democracias plenas en el mundo. Bueno, en fin, ellos dicen que todo eso se refleja en la calidad de sus vinos.

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