Tras su edición extra del domingo, MasterChef volvió anoche a su horario habitual y en su proceso de búsqueda del mejor cocinero para la tercera temporada, eliminó a Andrea Vera quién tuvo una jornada negra. En los dos desafíos del programa, ella tuvo la oportunidad de elegir el plato de su preferencia y pese a ello fracasó en ambas instancias. MasterChef está entrando en su etapa de mayor decantación dejando a salvo, solo a los mejores.
A lo largo de toda la temporada Andrea venía con altibajos, con más tumbos que destaques, aunque no hace muchos programas atrás, el mbeju que preparó fue destacado como el mejor y vio todo el programa tranquila desde el balcón. Anoche, fue la única que tuvo el privilegio de preparar los platos de su elección, lo que representaba una ventaja inigualable. Sus demás compañeros debieron cocinar las recetas que eligieron otros.
Andrea eligió y cocinó Polenta con estofado de carne y carrot cake y en vez de lucirse con algo que era de su predilección fracasó totalmente y fue a la ronda de eliminación. Aquí ella optó por un ceviche de surubí y un pionono relleno de pollo. Un mal concepto del ceviche y la mala elección de surubí para realizarlo la condenaron. Se puso en evidencia su falta de ideas claras a la hora de formular sus platos y la limitada técnica para realizarlos.
MasterChef utiliza varios recursos para tratar de darle más emoción y dinámica al programa. Pruebas de conocimiento, pruebas de presión, sorteos, trabajo en equipos, que muchas veces libran a los competidores de tener que enfrentar la prueba de eliminación. Pero está llegando el momento en que los participantes tienen que salvarse o eliminarse, exclusivamente con sus propias preparaciones.
El programa de anoche nos permitió anotar algunos puntos llamativos. Por ejemplo, Ricardo hizo el mejor plato del primer desafío. Su primer mejor plato del programa. Su chicharõ huiti con papas Ana estuvo impecable. Y pensar que fue pensado e ideado por Isaías. Revela que en cualquier momento podría dar una sorpresa. Joaquín, uno de los principales candidatos al título hizo el peor plato en esta instancia. Su Tagliatelle en tres colores fue realmente un desastre y lo envío directo a la ronda de eliminación. Fue su peor plato en toda su participación en MasterChef y lleva dos temporadas.
Claro, que cuando en la eliminación le tocó cocinar los ravioles rellenos de surubí con salsa agria, camarones y costra de puerros que había elegido para el primer desafió se lució con creces y fue el primero el salvarse pasando al balcón. Este mismo plato, también dio oportunidad para que se luzca Fernando en el primer desafío. Su desempeño estuvo un poco detrás de Ricardo librándose de la ronda de eliminación.
Isaías que venía de salvarse tras el repechaje tuvo que enfrentarse a un pollo relleno aforrado y pastelitos rellenos con dulce de guayaba, que había elegido Noelia. Y pasó la prueba sin muchas dificultades, dando también muestras de que puede afrontar bastante bien los cambios de planes que un cocinero debe enfrentar en las cocinas, y sobre todo en las cocinas del MaterChef.
Walter, otro de los más flojitos, preparó en la primera instancia unas costillitas de cerdo con salsa agridulce y una torta de naranja rellena con dulce de guayaba. El cerdo estuvo fatal ni siquiera probaron los miembros del jurado porque no estaba bien cocido. Sin embargo, hizo una excelente torta. Pero no pudo evitar la ronda de eliminación. Sin embargo, a raíz de un problema de salud no pudo participar, así que está condenado directamente a ir a la ronda de eliminación en el próximo programa.
Martita Martínez fue la otra que estuvo en capilla junto a Andrea. En la prueba de eliminación tuvo la oportunidad de cocinar el cóctel de camarones y los buñuelos de surubí en salsa de dos quesos que había elegido para el primer desafío de la noche. No hubo muchas devoluciones del jurado respecto a su plato, pero ella siempre está bailando en la cuerda floja, entre ir o quedarse en el programa, casi casi en las mismas condiciones que Walter. Mientras, el cuarteto formado por Joaquín, Isaías, Fernando y Ricardo se afianza como un bloque en la marcha hacia el título. Son los que tienen mejores argumentos gastronómicos. Pero nada está dicho, porque MasterChef siempre está dispuesto a dar alguna sorpresa.